Fiestas Juradas de San Miguel en Tuineje

Fiestas Juradas de San Miguel en Tuineje
Camellos Para El Inglés. El coraje de un pueblo

POR: Libertad Morales. Para La Revista Mi Pueblo Fuerteventura. (Publicado en la edición nº 13 en Octubre de 2012)
APROXIMACIÓNLas Fiestas Juradas de San Miguel conmemoran la victoria de las milicias majoreras sobre los corsarios ingleses en 1740, un suceso que ha ido adquiriendo relevancia con los años y que se ha convertido en emblema de un pueblo. Su celebración dura casi un mes y cuenta entre sus actos con la romería de mayor participación de toda Fuerteventura.

Corría el 1740, España estaba en guerra con Inglaterra y los corsarios ingleses asediaban las islas. El 13 de octubre una embarcación amarró frente a la zona donde hoy está Gran Tarajal y desembarcaron 53 ingleses. Los invasores no imaginaban lo que les esperaba.
Armados con escopetas y pistolas los corsarios fueron saqueando en su camino hacia Tuineje, llegando a robar y mancillar la propia iglesia, sin embargo los majoreros se movilizaron durante la noche y al clarear el día los ingleses se encontraron con las milicias que se habían ido formando, con el el Teniente Coronel Sánchez Umpiérrez al frente de los vecinos, armados sólo con rozadas, piedras y palos.


El enfrentamiento se hizo inevitable en la que hoy se conoce como batalla de El Cuchillete, donde los ingleses resultaron derrotados. La táctica de las milicias fue cercar a los corsarios y atacar con una primera línea de camellos que sufrieron la oleada de balas, sirviendo como escudo a los vecinos y forzando el encuentro cuerpo a cuerpo. 33 de los 53 desembarcados fallecieron y se apresaron a los supervivientes. REPRESENTACION
Aquel día quedó marcado en la memoria de las gentes de la Isla y desde entonces se celebra en el municipio la conmemoración de dicho acontecimiento en las Fiestas Juradas de San Miguel Arcángel, declaradas Bien de Interés Turístico y que este año ha celebrado su 272 aniversario.


DESDE SIEMPRE. En el pueblo de Tuineje el reloj de la Iglesia marca las 12 del mediodía. A los doce toques les sigue un repique continuado de campanas anunciando que algo va a pasar. Se oyen voladores y el pueblo se prepara para las fiestas. Desde quince días antes del comienzo de los festejos el repique de campanas se repite hasta el final de la celebración, una tradición que según Antonio Domínguez, vecino de la localidad, "es desde siempre, para alertar al pueblo de que algo va a ocurrir".


Antonio Domínguez está jubilado, en el Centro de Mayores de Tuineje ha empezado con un grupo de música que ha tocado en los actos de este año. Fue concejal de festejos en la primera legislatura de la democracia y siempre ha estado ligado a comisiones de fiesta, movimientos vecinales, el club de lucha y el de fútbol. Defiende a capa y espada, como buen morisco, el carácter hospitalario de su pueblo y el sentimiento de unidad.
DEFENSA"En Tuineje siempre ha existido un comunismo blanco. Hemos sido un pueblo solidario con todo el que venía, aquí nadie se quedaba sin comer. Si el vecino no tenía, siempre había un plato para él, pero también era un pueblo que nunca se dejaba amedrentar por nadie, si venían de gallito salían trasquilaos", confiesa Antonio quien recuerda con cariño los días de fiesta de su infancia, cuando aún no había luz eléctrica y se alumbraban con luces de carburo, unas lámparas como cafeteras que desprendía una luz muy brillante.

"De pequeño lo que más recuerdo eran las ruletas. Todos los chiquillos íbamos a echar una perra chica y siempre tocaba algo: una sopladera, un pito y todos los chiquillos pitando", rememora. "Y también los puestos de manzana, la manzana francesa verde y achatada con un olor que la gente las compraba para guardarlas dentro del ropero, algo que era un lujo y uno se la compraba a la novia,en aquel entonces era muy típico”
Los medios eran pocos pero con lo que había se engalanaban las calles, se blanqueaba la iglesia, con palmeras y pitones se hacían los ventorrillos y a la salida de función se preparaban los pucheros con leña para todo el que salía. "Yo lo tengo muy presente, todo lleno de ventorrillo y los bailes", rememora Antonio, "Eran quince días de fiesta, claro que el que venía caminando ya se quedaba para una semana. La gente que se marchó a las tierras de la costa volvían siempre en las víspera de la fiesta montado en burro y en camello , venían antes para blanquear las casas y prepararlas. Era un ambiente de fiestas desde quince días antes y el pueblo se iba repoblando de nuevo, hablo de los años 40 y 50".

Para la romería, igual que ahora, llegaban gentes de todas parte de la Isla y para los bailes orquestas de otros puntos del archipiélago. Los bailes, como era natural, servían para el acercamiento entre chicos y chicas. También se hacían representaciones de la batalla pero sólo en el pueblo y sin el actual despliegue. “Siempre se hacían representaciones pero no como ahora. De pequeño había pero en una escala menor y ahora están más preparadas culturalmente”. Año tras año el municipio de Tuineje se ha volcado en la representación de estos hechos que poco ha poco han ido adquiriendo más presencia mejorándose con los años y contando con la colaboración del resto de municipios y de todos los vecinos.IMGP3644

REPRESENTACIONES. Este año las Fiestas Juradas comenzaron el 23 de septiembre con un emotivo pregón a cargo de los jóvenes de la Banda San Miguel y finalizarán el 20 de octubre con la celebración de la ya tradicional Feria del Ganado que cumple once años.

En estos días han sido muchos los actos y actividades que se han realizado para conmemorar las Batallas de El Cuchillete y de Tamasite, así como para honrar a San Miguel. Sin duda uno de los eventos que más público atrae son las representaciones que alcanzan desde el desembarco en Gran Tarajal a la entrada triunfal de las milicias en Tuineje. En esta ocasión han sido seis las representaciones localizadas en distintos puntos, tanto del municipio como de otras partes de la Isla.


Así en Antigua, Pájara, Gran Tarajal, Tiscamanita, Tarajalejo y Tuineje los vecinos de cada uno de los pueblos se han volcado de lleno en meterse en el papel con la colaboración de asociaciones y parrandas.Durante esos días de fiesta los visitantes pueden revivir con los habitantes del pueblo el momento histórico acontecido en octubre del 1740.
Juan José Cabrera es uno de los miembros de la Asociación 'Más ruines que Caín' quienes desde hace cinco años se encargan de organizar a los diferentes grupos para que todo salga perfecto el día de la representación. “Pretendemos que cada representación guarde el mayor rigor histórico”, afirma Juan José Cabrera, “por ello este año hemos cambiado al bandera roja y amarilla por la que correspondería verdaderamente a esa época. Son detalles que se deben respetar”.
Por esta razón, el trabajo previo de preparación se prolonga durante todo el año.“Empezamos a ensayar con el pueblo unas semanas antes pero el trabajo de gestión e investigación se desarrolla en los meses previos, para que no haya fallos”.

INGLESES EN TIERRAEn total participan unas 200 personas lo que supone una importante labor de organización.”Hasta hace cinco años la implicación del pueblo había decaído sin embargo está resurgiendo nuevamente. Cada vez hay más entusiasmo y no sólo en Tuineje, también en los pueblos y en otros municipios”, cuenta Cabrera.

El interés se produce en gran parte por la importante labor de promoción que realizan en diferentes ámbitos, desde los Campamentos Perenquén a los colegios.
Juan Ramón Pérez Gopar ha sido el encargado este año de impartir los talleres anuales en los que narra los hechos aquel momento histórico. Cuenta-cuentos, cómic y un juego gigante de preguntas y respuestas son las actividades que este animador sociocultural lleva a los centros educativos, donde los niños escuchan atentos, primero curiosos, atraídos por la casaca roja de corsario inglés que porta Juan Ramón, y luego interesados por saber más sobre su propio pasado y la historia majorera. "Me sorprende el interés que ponen y la repercusión que tiene en las actividades del centro", cuenta Juan Ramón, "En los colegios en los que he estado antes los niños se acuerdan perfectamente del año anterior y no sólo eso, el trabajo se puede ver en la continuidad durante todo el curso. Así, en el día de Canarias siempre se acuerdan de esta historia".


Un cómic publicado por el Cabildo Insular y el Ayuntamiento de Tuineje y realizado por el artista gráfico Marcos F. y basado en el libro 'Ataques ingleses contra Fuerteventura 1740' de Antonio de Bethencourt y A. Rodríguez es parte del material que Juan Ramón utiliza en sus talleres, de manera que la enseñanza se MG 1722a más divertida.

Junto a los actos conmemorativos y lúdicos se celebran también los actos religiosos entre los que destaca la Romería de San Miguel que cada año acoge a cientos de personas desplazadas desde todos los puntos del archipiélago para compartir este mágico momento con todos los majoreros, porque quien acude a la Romería de Tuineje repite seguro.


REFERENTE CULTURAL Y TURÍSTICO. No cabe duda que estas Fiestas Juradas no son sólo un referente cultura para el pueblo de Tuineje sino también un importante reclamo turístico para Fuerteventura.
Juan José Cabrera de la Asociación 'Más ruines que Caín', tiene muy claro que la dinamización en torno a la batalla puede convertirse en un importante recurso para el pueblo de Tuineje. “El atractivo cultural y turístico de estas Fiestas Juradas debemos aprovecharlo todo el año”, afirma, “no se debe quedar en sólo estos días sino que hay que extenderlo para que la gente venga a Tuineje a conocer su historia y cultura”.

Varios son los proyectos que Cabrera ha presentado en ese sentido, desde la ubicación de estatuas que vayan relatando los hechos históricos hasta la amplia empresa de crear un museo de la batalla en la Casa de la Simona y un patronato de investigación y difusión.
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